Ecos del Santo Reino se crea con la única intención de darme a conocer, solo pretendo poner una pincelada más al patrimonio literario de mi querida tierra Jienense.
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jueves, 2 de mayo de 2019

Venid y vamos todos

 

 Quienes fuimos niños en la década de los sesenta nunca podemos olvidar el soniquete musical de la canción mariana “Venid y vamos todos con flores a María…” que durante el mes de mayo se repetía cada tarde en el ofrecimiento de “la flores” que, en forma de verso, recitábamos los niños y las niñas. Venid y vamos todos con flores a porfía, con flores a María que Madre nuestra es. De nuevo aquí nos tienes purísima doncella, más que la Luna bella postradas a tus pies. Ahora que los niños hacen su primera comunión yo recuerdo aquellos mayos escolares, donde todas las tardes del mes se rezaban las flores en el vestíbulo de Ruiz Giménez “las escuelas nuevas de la Magdalena”, el mes de las flores, el mes de María, flor de las flores. Recuerdo la tarde en la que estando sentado en el suelo, porque los niños nos sentábamos en el suelo y los profesores se sentaban en unos bancos que había en la estrada, una de aquellas tardes me quede “frito” y de golpe me despertaron dos buenos coscorrones que me proporcionó el célebre Don Julio, me levanté de un golpe, abrí los ojos y miré la hornacina donde estaba la Virgen, abrí los brazos y recite con énfasis lo primero que se me vino a la cabeza: "Aunque soy tan pequeñito, y tengo tan poquita voz, nada me impide decir ¡viva la madre de Dios!". Aquello provoco las risas de todos los niños y profesores. Quiero recordar que durante todo el año en la hornacina que había justamente al principio de la escalera estaba el Sagrado Corazón de Jesús un tanto desportillado y en mayo lo cambiaban por una Inmaculada. En aquellas calurosas tardes se agradecía que las clases terminaran una hora antes, para poder realizar la ofrenda de flores a María. Recuerdo que salíamos de la clase caminando en una fila ordenada, cantando. Venid y vamos todas/ con flores a Porfía/ con flores a María/ que madre nuestra es... (Ay, aquel Porfía indescifrable...). Las alumnos nos íbamos colocando en torno a la imagen, con un orden por clases, los cursos superiores se sentaban en las escaleras. "De nuevo aquí nos tienes/ Purísima Doncella/ más que la luna bella/ postradas a tus pies...". En aquella singular ceremonia no había lugar para la improvisación; cada día se establecía el reparto de tareas entre los alumnos, unos barríamos, la entrada otros tirábamos los contenedores y Don Julio era el encargado de dirigir el rezo, se sabía el santo rosario de carretilla, nosotros los niños también y pobre del que no se lo sabía los rosarios acababan con una oración: Oremus deus-equipe resurrección peca-toru prestacuesimo pereunde Cristo dormidu nostru (Puedo asegurar que este era el latín, así leído en voz alta y así escuchado

1 comentario:

  1. Yo también cantaba esa canción en el mes de mayo durante las flores.Estudié en un colegio de monjas donde había su propia iglesia y que era donde duante todo el año antes de irnos a casa se rezaba el rosario pero en el mes de mayo lo hacíamos con cantos y la ofrenda de flores.Saludos

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